En la industria del cine, el papel de la mujer tras las cámaras es cada vez más relevante. Tras un siglo en el que los hombres copaban todos los roles técnicos de las producciones audiovisuales, cada vez son más las mujeres que dirigen o tienen un rol importante en la realización de una película. Aún así, todavía queda un largo camino por delante para llegar a la igualdad en este ámbito. En España, por ejemplo, el porcentaje de mujeres profesionales en el mundo del cine sigue siendo sólo del 29%. En Hollywood, donde se gesta la mayoría del cine comercial, el dato es aún peor: sólo un 8% de las películas están dirigidas por mujeres. Sin embargo, en los últimos años ha surgido una tendencia que podría dar impulso al cine hecho por mujeres: los festivales de cine feministas, centrados en películas donde la mujer se encuentra, por primera vez, detrás de las cámaras.
La tendencia de los festivales de cine con perspectiva feminista comenzó en países europeos como Alemania y Holanda, donde se empezaron a celebrar eventos centrados en films dirigidos por mujeres: la Feminale y el Festival Internacional de Assen. Otros festivales internacionales como el London Feminist Film Festival o el African American Women in Cinema, centrado especialmente en las mujeres afroamericanas, han proseguido la tendencia de los festivales feministas en todo el mundo. Hoy en día ya hay festivales de este tipo en más de 45 países. También en España se han asentado numerosos eventos que tratan la problemática de la mujer en el cine. Estos son algunos de los festivales feministas más importantes de nuestro país:
Mostra Internacional de Films de Dones (Barcelona). Con su primera edición en 1992, se convirtió en el primer festival de cine con perspectiva feminista de España y, desde entonces, ha seguido llevándose a cabo cada año hasta ahora. Además de la proyección de películas, la Mostra se encarga de conservar los films creados por mujeres en el arxiu de films de dones, en el que ya hay más de 2500 títulos. También tiene su propia distribuidora, Mostra Distribucions, que ayuda a las películas proyectadas a seguir con su distribución en festivales de todo tipo.
Festival Cine por mujeres (Madrid). A pesar de llevar sólo dos ediciones, se ha convertido en uno de los festivales de referencia. Para la edición de este año, se aumentarán el número de proyecciones, así como la duración del festival, que pasará a ser de casi dos semanas: del 15 al 26 de abril. Además, el Festival Cine por mujeres no sólo se centra en la exhibición de largometrajes, también incluye programas de formación, con profesionales de la industria que van desde directoras o guionistas hasta especialistas de efectos visuales y compositoras de bandas sonoras.
Festival Dona i Cinema (Valencia). Creado en 2011 en el seno de DONESenART, un proyecto cuyo objetivo es visibilizar el trabajo de las mujeres en el arte, este festival consta de un “formato competitivo”, con una sección oficial, acompañada de una serie de actividades de educación, reflexión y debate sobre el papel de la mujer en la industria del audiovisual. En este sentido, el festival ofrece varios ciclos independientes de la sección oficial, como son el Ciclo Mujeres tras la Cámara, los homenajes a las directoras del cine internacional, el Ciclo Palmarés, con películas premiadas en otras ediciones y el Ciclo Directoras valencianas. Además, colabora estrechamente con el Festival Internacional de Cine y Derechos Humanos de Valencia (HUMANFEST), otro de los festivales de referencia en la ciudad.
Muestra de cine dirigido por mujeres (Bilbao). El Zinemakumeak gara!, como se conoce en Euskera, celebrará este año su 24ª edición. Se trata de uno de los festivales de cine feminista más antiguos del país. Entre sus actos, además de la proyección de películas, se llevan a cabo mesas redondas para debatir diferentes aspectos de la participación de las mujeres en la industria, así como entregas de premios como el Simone de Beauvoir, que este año se dará a la productora Puy Oria. Por último, en esta edición también se incluye un “Taller de iniciación a la mirada crítica”, para completar la programación del festival más allá de las proyecciones cinematográficas.
En definitiva, los festivales de cine feministas han demostrado ser uno de los recursos más efectivos a la hora de promover las películas hechas por mujeres. Con la llegada de esta tendencia a España, se demuestra el interés que hay por mejorar la situación laboral de las mujeres en el cine. Al fin y al cabo, como señala Carmen Calvo, ”el cine es un arma poderosa y pacífica, forma parte de la vida moderna y tiene que ser cambiado con la participación activa de las mujeres. Las mujeres sólo queremos competir en igualdad de oportunidades”.
Carlos Urquijo Martínez.
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